Euskadi: Osakidetza al borde del colapso.El personal sanitario denuncia la falta de medios y precarias condiciones de trabajo 

     El reciente fallecimiento de una enfermera en el hospital de Galdakao, el primero entre el personal sanitario, ha dejado al descubierto la precaria situación profesional del personal del sistema sanitario vasco. Les aplaudimos desde las ventanas y otorgamos el reconocimiento a la ingente labor que están realizando, más ahora en la pandemia del coronavirus, donde son la primera línea de defensa contra la enfermedad. Sin embargo, de manera anónima y por miedo a represalias, las voces del personal sanitario claman contra la gestión de la pandemia. Sin guantes , ni mascarillas, y con el material justo y dosificado para realizar los primeros test de la enfermedad, el número creciente de casos y la ausencia de un protocolo claro y determinado, está colapsando los hospitales.

     

   Las bajas por estrés o por enfermedad  de un personal cada vez menos protegido y con más horas de dedicación, comienzan a ser cada vez mayores y desde el Gobierno Vasco se ha procedido a llamar a médicos y personal sanitario jubilado o de prácticas para su incorporación inmediata. Todo ello cuando no se ha alcanzado todavía el pico máximo de la enfermedad, que se calcula que en Euskadi puede alcanzar a 10.000 personas según la progresión de contagios, que a día de hoy llega a 1.465 casos positivos.                      

    En el pulso de Euskadi con el coronavirus, el personal sanitario está dando todo desde una profesionalidad manifiesta. No hay peros. Sin embargo, la rabia y la impotencia por la carga y condiciones de trabajo es un hecho claro y constatable. Nuestros héroes anónimos quieren seguir siéndolo por miedo a las represalias, para denunciar la falta de protocolo y armas para igualar la lucha contra la pandemia.

   Los hospitales y las urgencias están al borde del colapso y el personal sanitario desmoralizado. Nos faltan mascarillas apropiadas, batas especiales y gafas de protección, reclaman.

   Nos vamos a casa conscientes de que podemos transmitir la enfermedad a nuestras familias porque no tenemos los sistemas de protección adecuados, recuerdan a los responsables.

    Hoy en el diario El Correo, titulares como Somos soldados rasos y dan por hecho que las enfermeras somos bajas asumibles ( personal del Hospital de Cruces), Vamos a caer como moscas, pero les da igual ( Hospital de Usánsolo - Galdakao), Si sigue así en unos días no vamos a dar abasto (Hospital de Basurto) o Estamos desbordados, ni las urgencias pueden con tanto paciente (Hospital Universitario de Álava), dejan claro el hartazgo de la mayor parte de nuestros héroes en la lucha contra la pandemia.                           

Fuente: Osakidetza